Al crear un sitio web, quizás se piense que no será necesario hacer alguna redirección en el futuro, sobre todo cuando se empieza un proyecto con la consciencia de evitar cometer errores y optimizarlo.
Sin embargo, siempre ocurren situaciones por las que deben hacerse, y es que las redirecciones juegan un papel crucial para asegurar que los usuarios y los motores de búsqueda lleguen al contenido correcto.
Una de las redirecciones menos conocidas, pero extremadamente útil, es la redirección 308 ¿Habías escuchado de esta? Seguramente no, y es fundamental conocer más del tema por si debes llegar a usarla.
¿Qué es una redirección 308? ¿A qué refiere?
Una redirección 308 se puede definir básicamente como un código de estado HTTP que indica una redirección permanente similar a la 301, pero con una diferencia clave: mantiene el método HTTP original utilizado en la solicitud.
Esto significa que si un usuario envía una solicitud POST, el servidor redirige al nuevo recurso utilizando el mismo método POST, a diferencia de la redirección 301, que es más común, que podría cambiar el método a GET.
Es útil en situaciones donde se requiere preservar el método y el cuerpo de la solicitud original, y particularmente relevante para aplicaciones web que manejan datos sensibles o transacciones, donde cambiar el método HTTP podría tener implicaciones no deseadas, aunque existen otras situaciones en donde se recomienda.
¿Cuándo es recomendado su uso?
- Preservación de métodos HTTP. Cuando necesitas redirigir a un nuevo recurso pero es crucial mantener el método HTTP original y el cuerpo de la solicitud. Esto es usual en aplicaciones donde las solicitudes POST contienen datos importantes que no deben perderse.
- Migración de URLs. Si cambias la estructura de URLs de tu sitio web y quieres tener la seguridad de que las solicitudes realizadas con métodos como POST o PUT se redirijan correctamente sin cambiar el método.
- Manejo de APIs. En el desarrollo de APIs la redirección 308 es clave para que las operaciones continúen funcionando correctamente tras una redirección.
- Seguridad de datos. En situaciones donde la integridad y seguridad de los datos son esenciales, y hasta se consideran un no negociable, usar la misma evita que los datos se expongan a riesgos innecesarios al cambiar el método HTTP.
- Mantenimiento de formularios. Si un formulario web envía datos utilizando un método POST, y el recurso al que apunta necesita ser redirigido, la redirección 308 garantiza que los datos del formulario no se pierdan en el proceso.
- Implementación de HTTPS. Al migrar un sitio de HTTP a HTTPS, la misma probablemente sea la más adecuada para las solicitudes originales, incluidos los métodos y datos, para que preserven cuando se redirigen al nuevo protocolo.
- Aplicaciones con estados complejos. En aplicaciones donde las solicitudes cambian estados en el servidor, se tiene que mantener el método original de la solicitud para evitar errores o inconsistencias en la aplicación.
¿Por qué es importante hacer la redirección correcta?
- Integridad de los datos. Se garantiza que los datos enviados por los usuarios se mantengan intactos durante la redirección, un aspecto que llega a ser crucial.
- Experiencia del usuario. Una redirección incorrecta puede llevar a una mala experiencia de usuario, como pérdida de datos, errores en formularios o comportamientos inesperados. La redirección 308 ayuda a evitar estos problemas que son negativos.
- SEO y motores de búsqueda. Contratar servicios de agencias de outreach y link building como Autoridadigital.es, u otros, servirá de poco o nada si la redirección que debe hacerse no es la correcta, siendo que se perderá en este sentido. Es esencial entonces la 308 para que los motores de búsqueda puedan seguir el sirio sin perder contexto, para que no afecte el posicionamiento.
- Funcionalidad de la aplicación. En aplicaciones complejas, donde diferentes métodos HTTP tienen roles específicos, una redirección incorrecta romperá la funcionalidad o causar errores graves. La 308 evita estos problemas al asegurar que el método y los datos se mantengan intactos.
- Mantenimiento a largo plazo. Usar la redirección correcta desde el principio simplifica el mantenimiento futuro del sitio o la aplicación, ya que se evitan problemas potenciales relacionados con la pérdida de datos o errores en las solicitudes para que no cueste caro.